No se si faltará algún personaje, si eso avisad o meteros directamente donde veais un hueco. Se que faltan los hermanos de Romeo, pero como nadie los lleva... Lu, quiero ficha, Dee, quiero ficha, etc...
Capítulo 1
Escena nº 3
Plató nº 2
- No
- ¿por qué no?
- He dicho que no y punto, ni tú, ni tu hermana vais a ir a esa fiesta.
Las gemelas miraron a Anthony, quien se centró en su periódico de nuevo, disgustadas y Topanga aprovechó la pausa para darle un empujoncito a su hermana Savannah.
- Venga, usa tus artes pelotiles, Savy –susurró Topanga a su gemela.
- Tony. Papi de mi corazón…
El cabeza de familia suspiró mientras volvía a bajar el periódico para prestar atención a Savannah.
- Sabes que te queremos mucho… -comenzó Savannah mientras que ella y Topanga se colocaban a ambos lados de la silla de su padre.
- Y que siempre hacemos lo que nos dices… –siguió Topanga.
- ¡JA! –exclamó Tony con sarcasmo
Savannah pellizcó a Topanga por detrás de la silla y la última apartó la mano y miró a la primera con cara de confusión.
- Pero dadas las circunstancias… -Savannah se acercó a Tony remoloneando y con cara de cachorrito- Es LA fiesta, ¿en serio vas a dejar que mi hermana y yo nos quedemos sin ir a tal acto social?
- Exacto –contestó Tony.
- ¡Exacto! –Dijo también Topanga con total seguridad- ¡¿Qué?! ¡Pero…! ¡Papa!
- Los Montesco estarán allí…
- ¡Por eso mismo! –Savannah puso una expresión de fiereza propia de William Wallace mientras miraba al horizonte y hablaba con voz pausada- No debemos doblegarnos a su poder. ¡Tenemos que ser fuertes!
- Puede que nos quiten la vida, pero jamás nos quitarán ¡la libertad! –acabó Topanga.
- ¡Ya! Ya, vale, captado, no os vais a rendir hasta que os deje ir… -Tony se quedó pensativo- Está bien, todo sea por una buena causa, pero…
- Wiii, gracias Tony
- Si es que eres tan bueno
Las hermanas besaron en ambas mejillas a su padre y se dispusieron a irse.
***
Mientras tanto, en la entrada al estudio…- ¡LIONEL! ¡LIONEEEEEEEEEEEEEEEL!
- ¡ROMEO, AQUÍ!
- ¿No te molesta que te confundan con tu personaje?
- Nunca, y qué más da, me adoran, Lionel –el joven protagonista de la serie se acercó a las vallas para firmar unos cuantos autógrafos.
Lionel puso los ojos en blanco
- ¿No es fantastibuloso? –Chris se dejó ver asomándose a la puerta del estudio- ¡BITCHIES! ¡¡OS ADORO!! –gritó con gestos teatreros.
A partir de ese segundo el coro de voces dejó de aclamar a Romeo y coreó el nombre del rubio oxigenado. El protagonista de la serie, enfadado se acercó a Chris.
- Este es mi público, putah.
- Tranquilo nena… -Chris le miró de arriba abajo- O-M-G, he de admitir que me pones cuando te enfadas –le susurró ronroneando mientras acercaba la mano a su pecho.
- Gracias, suelo tener ese efecto, pero sigue siendo mi público, ¡¡así que ni se te ocurra usurpármelo!! O te arrepentirás –dicho esto se perdió dentro del estudio dejando a Chris en la puerta escuchando como coreaban su nombre.
- ¿Putah yo…? esa no se ha mirado al espejo, con tanto lápiz de ojos parece una ramera barata- comentó para si mismo entre dientes mientras sonreía a sus fans- ¡OS QUIERO CHICAAAAAS!
Entró a los estudios y comenzó a caminar por los pasillos.
- Esto es infinitamente mejor que el Tuyoube, ¡¡la gente realmente me adoraa!! Dios debe ser uno de mis mayores fans – dijo mirando hacia el techo de los pasillos que recorría – ¡I love you God!
Continuó andando por los pasillos hasta llegar al plató general
***
- ¿Alguna novedad? –preguntó Lionel entrando al plató nº3- ¿Qué escena están grabando?
- La misma de hace una puta hora –Xandra dio un trago a su vaso de whiskey- y de hace dos… y tres… etcétera.
Lionel se rió y se sentó en una silla junto a Xandra.
- No sé qué coño le pasa a Luke, lleva todo el puto días distraído mirando a todos los putos lados. Es jodidamente molesto porque hasta que no acabe esta puta escena yo no podré salir a decir mi puta frase, por lo que no podré irme a mi puta casa –la actriz dio una calada a su cigarrillo- ¿Quieres una calada? –Le ofreció- Te daría uno, pero la puta de mi manager me ha quitado el paquete. Es una de esas personas que piensan que vivir de forma saludable es bueno.
- ¿Y no lo es? –preguntó Lionel.
- ¡Pues claro que no lo es! ¿Es que hoy todo el mundo está tonto o qué? Señor…
***
- ¡PERO…! –Tony volvió a repetir la última palabra para frenar a las gemelas y obligarlas a regresar a su lado
- ¿Pero qué? –preguntaron al unísono.
En ese momento, Luke se distrajo con la entrada de Lionel en plató y tardó más de la cuenta en contestar.
- ¡CORTEN! –Hellen subió el par de escalones que permitían subir al escenario y con un periódico enrollado le dio varias veces a Luke en el brazo- ¿Pero será posible? ¡¿QUIERES CENTRARTE DE UNA VEZ?! ¿Se puede saber qué te pasa?
- ¿Síndrome post vacacional? –contestó un asustado Luke encogiéndose de hombros.
Hellen torció el morro y suspiró.
- ¡DESCANSO DE TREINTA MINUTOS! A ver si a la vuelta cambiáis el jodido chip… -gruñó y bajó del escenario.
Al pasar junto a Xandra, la directora le quitó el cigarrillo de las manos y se fue con el dando unas angustiadas caladas.
-¡Eh! –exclamó su dueña original, pero ya era demasiado tarde.
Luke dejó el periódico sobre la mesa y se levantó.
- Ya lo siento –le dijo a las gemelas y bajó del escenario estirándose.
- Es hora de que despiertes, Luke, toma –Maddie (no recuerdo si este era su nombre) le dejó un vaso de plástico lleno de café al hombre en las manos- ¡Hola! ¿Qué tal las vacaciones? –preguntó mientras se acercaban a Xandra y a Lionel.
Luke levantó la vista y miró a Lionel con especial atención mientras sonreía.
- ¿Qué? Muchas fiesta, ¿eh? –Preguntó Luke a Lionel- Creo que te he visto en todas las portadas de revistas de todas las semanas.
***
En el camerino, Julieta se vio interrumpida por unos golpes en su puerta.
- ¿Quién es? –preguntó la protagonista.
- Tu jefa, más vale que te des prisa, tienes ensayo con tu “Romeo” –dijo en tono despectivo- en cinco minutos. Plató número dos.
- Porque no hay nada mejor para superar la crisis post-vacacional que volver a ver la cara de ese condenado gilipollas –suspiró la joven actriz.
***
Chris se acomodó en una de las sillas del plató número dos después de haber seguido a Romeo hasta allí. El actor principal se dedicó a dar vueltas por esa zona gritando a diestro y siniestro porque alguien había echado un cristal de azúcar de más a su zumo.
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